" LA HISTORIA DEL BOLICHE EL TROPEZÓN"

Alcancé a conocer un viejo boliche en el recodo de un camino perdido. Llegaba allí de a caballo primero, con la moto después.
Tal vez por el tema de que se "tropezaba" con él, tenía justamente el nombre de "El Tropezón".
 
Era atendido en aquellos tiempos por varios hermanos que se turnaban para servir las copas y escuchar a los parroquianos que, los pingos en el palenque, se amontonaban a contar sus peripecias en la huella.
 
Las anécdotas se repetían en boca de los bolicheros del paraje "El Tropezón" y siempre aparecía gente nueva, por aquello de que buscando se encuentra y a los viajeros estos, si algo les gustaba era contar y escuchar historias del camino. 
Un día, no se que pasó. Pero de a poco los viajeros dejaron de acercarse al boliche aquél, donde las sombras empezaron a reinar.
 
Hay quién sostiene que cerca de ahí asfaltaron una ruta... y los caminantes de los cuentos prefieren juntarse en otros parajes a los que se accede sin tanto trabajo.
 
Hay quién sostiene también que los hermanos aquellos que atendían el boliche sin negarle la copa a nadie y escuchando a todos con paciencia y tolerancia, tuvieron alguna desavenencia y de a a poco se ausentaron los que no querían pelear de gusto.
 
Quedó uno atrás del mostrador, pero sabe dios porqué  ya nadie se acercaba a traerle sus relatos de viaje.. y el boliche el Tropezón se volvió tapera...
 
Cuando me toca llegar, porque por esos caminos paso, me cuesta hacerme un lugar entre los yuyales crecidos para atar mi “caballo” al palenque abandonado.  Y la verdad, me temo que voy a empezar a pasar de largo.
 
 Extraño el tiempo en el que el boliche era atendido por los hermanos aquellos que escuchaban a todos... y a nadie se le negaba la copa.
 

Abrazos, P.

MUY BUENO PAYADOR!!!
QUE LINDA HISTORIA! 

Por como la contaste asumo que es real y que te sucedio y sucede   (aunque bien podria ser una narracion producto de tu ingenio) 
En fin, no es mi intencion desmitificar nada. lo disfrute y se agradece!!!! 
podriamos hacer una escursion alli antes de que llegue el frio (despues de MPicchu, claro) 
QUE DECIS??? QUE DICEN??? 

ABRAZO DESDE CAMPANA 

Que bueno PAYADOR!!!       

No tenes foto del TROPEZON!!! existe???

yo tambien tengo miedo que sea una cancion de folklore o un cuento de esos que conoces vos y yo no tengo ni idea          
j ej ejeje je je eje je ejeje eje je je ej
 je je je ej eje je je je jeeeeee

me gusto la historia y lo de ir tambien       

Hola!
QUE BUENO.
Me toca muy de cerca ya que -tristemente- recuerdo varios de esos boliches de campo que recorria a caballo en mis épocas juveniles y hoy dia  son tapera, o ya no existen. 
De la mano de la impecable y emotiva prosa de Payador asistimos a un proceso irreversible de desaparición de ciertos hitos que marcaron toda una época que los dinosarios como yo aún conocimos, y las generaciones venideras verán en unos pocos sobrevivientes que el turismo rescata.
Estoy absolutamente de acuerdo en una recorrida bolichifera antes de que sea demasiado tarde.
Habria que hacer una especie de inventario para armar una ruta que involucre la mayor cantidad posible.
Quien mejor que Payador que conoce tanto como para ser nuestro moderador en el tema, que les parece? Siempre que acepte, claro.
Una anécdota alusiva. A un km de donde vivo había uno de estos boliches donde se podia comprar desde un par de  alpargatas hasta un lazo, un kilo de porotos o una bolsa de galleta. En el mostrador forrado de cinc se acomodaban los paisanos para empinar su ginebra, en el centro una mesa de billargol recibia los desafíos "por la copa". Paralela a la calle de tierra, la cancha de bochas convocaba a los habilidosos.
Por fortuna los tiempos han sido benévolos con el "Boliche de Noli", hoy con otros dueños es parte ineludible del circuito turístico vernáculo. La cancha de bochas ya no existe, no podría hablar de la mesa de billargol pues hace veinte años que no entro. Los nuevos dueños son unos porteños odiosos que se han granjeado el odio de todo el barrio... pero al menos este boliche tiene vida para rato!
Y ya me fui por las ramas, caramba, disculpen.
Saludos para todos,
GUIDO

Estimado Paya

como dice el bueno de León...
que dignidad tan grande
la de creer siempre en la vida,
con solo ver una flor creciendo entre las ruinas.

Sera por eso, que cuando su arte ilumino la tapera, me hice surco entre los yuyos, para atar una vez mas mi caballo al palenque.
Quizás no sea una, sino todas las razones que cita,  por las que uno mira de lejos el tropezón y no entra.
Pero la única verdad es la realidad dijo alguien......
Y la realidad es que uno solo atiende el mostrador y cuando uno no quiere dos no bailan.
Claro que se extrañan esos viejos tiempos, en que a nadie se le negaba una copa

Brillante lo suyo!
Los artistas tienen la capacidad de amalgamar la razón y el corazón con el arte, para decir esas cosas que a uno lo conmueven y no sabe como expresarlas.
El arte moviliza, tal vez por eso genera esperanza.... ojala como usted bien dice.. que el camino nos junte.

Un abrazo

Estimado Nebur... sin palabras. 



Compartimos aquel almuerzo para mi legendario con la familia del Negro Falucho, inolvidable locro, Nebur, donde se nos cruzó Isidro Velázquez y  tus anécdotas de la infancia en los montes chaqueños.  Quedé con ganas de seguirla.


 


Para que tengan vida,
 los boliches del camino que reunen  a los andariegos 


no deberían perder el espíritu de los antiguos


 fogones


 de los arrieros, donde todos hacian rueda


 y el "capatáz de la tropa" (en el caso de que lo hubiera..) 


 tenía  la dignidad de allanarse a ser uno más en la ronda. 


Hoy por hoy y repitiendo tus palabras tengo las alforjas de la YBR como la caja de Pandora... repletas de esperanza. 


Ni más ni menos que eso. 


Abrazos a todos.  P.
(y si... que el camino nos junte)